Sabemos lo difícil que es empezar a buscar una casa en una ciudad que no conoces.

Con suerte tendrás algunas referencias, amigos que han visitado la ciudad, otros que conocen a alguien que vivió allí hace años o incluso algún familiar que esté ahora mismo viviendo en ese lugar.

—A veces es mejor no tener ninguna referencia —comenta pensativa Almu.
—¿Tienes razón! En vez de ayudar puede llegar a confundir —asiente Paloma.
—La verdad es que cualquier info se agradece sobre todo cuando empiezas a buscar desde cero.
—Y seguro que todos aconsejan con buena intención
—Eso seguro, pero el resultado no siempre es el deseado

Todas las ciudades, independientemente del tamaño, tienen barrios “especializados”. Esto es, según tu estilo de vida o tus intereses te encontrarás más a gusto en un área u otra.

Si has crecido en una ciudad, es algo que sale intuitivamente, sin darte cuenta, sabes a qué zona dirigirte dependiendo de tus gustos o necesidades y, desde luego, de tu presupuesto.

—Pero ¡hay un problema! Si siempre has vivido en tu ciudad, no te imaginas siquiera lo que supone una mudanza internacional —reflexiona Almu.
—Y tus consejos que, por supuesto, siempre son bienvenidos, no siempre son acertados —remata Palo.
—Al llegar de fuera, hay muchos más factores que intervienen y que hay que tener en cuenta.
—Para mí, es fundamental investigar mucho, no quedarte sólo con los comentarios de algún conocido.

Por otro lado, ss primordial centrarse pronto en una zona. Los beneficios de una elección temprana son muchos. Por un lado, reduces el tiempo que dedicas a la búsqueda de vivienda, cuanto mas grande la ciudad más esencial es reducir las zonas de búsqueda.

Hay miles de viviendas disponibles en alquiler en cualquier ciudad, es misión casi imposible analizarlas todas. Cuanto más concretos seamos con los criterios de búsqueda, más cerca del éxito estaremos.

—¡Claro! Es fundamental conocer la zona y el presupuesto.
—¡Y el número de dormitorios!
—O cualquier otro requisito indispensable en cada situación particular p.e. un garaje cómodo si necesitas coger el coche todas las mañanas temprano.
—Pero lo primero es elegir zona; en cuanto la tenemos, la búsqueda se agiliza.

Un segundo beneficio es llegar a conocer en profundidad la oferta inmobiliaria de la zona que te interesa, al ser un área más reducida puedes llegar a dominarla. Lo cual conduce al tercer beneficio, te facilitará tomar una decisión rápida en el momento de elegir tu casa.

En Madrid hay 21 distritos y, además, varios municipios alrededor de la capital, cada uno de ellos con distintas zonas.

En cada zona existen distintas tipologías de vivienda que permiten diferentes estilos de vida y, también, gran variedad de presupuesto.

Siendo sinceros, elegir la zona apropiada, sin conocer la ciudad, no es tarea fácil.

Puedes utilizar estos consejos:

• Leer info de los distintos barrios.
• Usar como lugar de partida un colegio o lugar de trabajo (el primero ayuda más que el segundo).
• Recomendaciones de conocidos, colegas del trabajo o del colegio.
• Asesorarse con inmobiliarias o relocators.

—Y lo principal, empezar la búsqueda en portales inmobiliarios locales.
—¡Exacto! Siempre ayuda para ir descartando las zonas en las que la mayoría de viviendas no encajan con los gustos personales de cada uno.
—Sin olvidar las diferencias geográficas y culturales, sobre todo, en tamaño de vivienda y decoración.
—Y, muy importante, las expectativas se vuelven más realistas al conocer la oferta real.

En caso de que tengas previsto trasladarte a Madrid en breve, en El secreto para instalarse en Madrid encontrarás toda la información relevante. Si, además, necesitas ayuda con la organización o, incluso que te acompañemos, revisa nuestros servicios.

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